Si usted está leyendo este material quiere decir que ya se ha enfrentado, y me atrevería a decir más de una vez, con el fenómeno ocular conocido como cuerpos flotantes, moscas volantes o miodesopsias.
Sé cómo debe sentirse ya que yo he sufrido el mismo problema y debí luchar durante años contra esta incómoda situación.
Observar Molestos Cuerpos Extraños Frente a Mi Vista, De Diversas Formas. Desde Pequeñas Burbujas Ovoidales Hasta Formas Parecidas a Cabellos. Puntos Que No Podía Eliminar, Porque No Existían En El Exterior Sino En El Interior De Mis Ojos!
Pequeños Cuerpos Flotantes Que Se Interponían En Mi Lectura “¿Allí Hay Una Coma o No La Hay?”, Perturbándola, Interfiriendo En Uno De Los Mayores Placeres De Mi Vida.
"Moscas Voladoras" En La Pantalla De Mi Computador, Interponiéndose Siempre En Mis Lecturas, Molestas, Crispantes, Insoportables.
Hasta Cuando Disfrutaba Del Sol En La Playa y Quería Por Fin Descansar, Ellas Allí Estaban, Opacando El Mejor Cielo Del Verano.
Y Numerosas Situaciones En Las Que Hasta El Detalle De Una Foto Era Atravesado Por Esa Desesperante Invasión De Manchas Que Parecían Acechar El Momento En Que Ponía Foco En Algún Objeto o Texto Que Me Interesaraba.
Las miodesopsias, cuerpos flotantes o moscas imaginarias (algunas de las maneras como se las conoce) no son en sí mismas una grave enfermedad. Pero en algunos casos puntuales, que más adelante voy a exponer con absoluta claridad, pueden ser síntoma de una enfermedad más seria que requiera una consulta inmediata con su oftalmólogo.
En la mayoría de los casos se trata de una disfunción propia de la edad adulta y de los adultos mayores. Aunque algunas veces se presenta en jóvenes, también incluso, existen casos de este síntoma en niños.
Existen diversas causas por las que usted puede estar sufriendo de los molestos efectos de las miodesopsias. Como mencione antes, uno de ellos puede ser la edad.
Las moscas volantes, o cuerpos flotantes, son Desprendimientos De Colágeno De Las Paredes Del Globo Ocular que al flotar en el humor vítreo (una sustancia gelatinosa que se halla en el interior del globo ocular) produce sombras que el cristalino recibe como la "presencia de objetos".
Existen además ciertos medicamentos de uso habitual que pueden favorecer la aparición de moscas volantes, que en realidad no son tan "imaginarias", porque como acabo de explicarle, son reales! Un traumatismo de cráneo, inflamaciones internas del ojo, e incluso la diabetes, pueden disparar la aparición de miodesopsias.
Pero ha llegado el momento de combatirlas y eliminarlas definitivamente de su vida. Para ello, solo le pido que me preste atención durante los próximos 5 minutos. Yo le indicaré, paso a paso, el camino para eliminar sus moscas volantes.
Una alta proporción de la población sufre de los síntomas de las miodesopsias y desea eliminarlas. Pero los procedimientos recomendados por la medicina actual son inútiles (me refiero al uso de colirios o a la ingesta de vitaminas), o son demasiado riesgosos.
Cuando digo métodos riesgosos me refiero a cirugías oculares sumamente complejas que pueden acarrear trastornos como infecciones en el delicado sistema ocular, e incluso por error profesional, el temido desprendimiento de retina. Todo ello sin mencionar los riesgos quirúrgicos que conlleva cualquier operación, por más sencilla que esta sea. Creo que a esta altura, usted tiene bien en claro qué quiere arriesgar, y qué no está dispuesto a poner en juego.
Ni tampoco desea someterse a una riesgosa y quizás inútil cirugia ocular (ya que tampoco pueden asegurarle el éxito total de estas intervenciones).
Seguramente, tampoco busca poner en riesgo la salud de sus ojos, sin tener antes un panorama claro de los resultados que puede obtener.
Mi nombre es Leonardo Gastellu, y hace algunos años (a mis 25 años de edad), descubrí que comenzaba a percibir formas extrañas en mi visión, en particular cuando me encontraba frente a una página en blanco o ante la pantalla del ordenador.
Surgían sombras, en algunos casos más transparentes que otras, y ello dificultaba la lectura e interfería en mi concentración. No podía creerlo! Eran objetos, pero ¿eran fruto de mi imaginación o eran reales? Porque yo en realidad los veía bien definidos, casi palpables.
Era una persona con una salud de hierro, llevaba un estilo de vida saludable y no entendía qué podía ser esta invasión tan molesta. En ese entonces me encontraba iniciando la especialización en oftalmología y consulté al adjunto de cátedra, el profesor Irurzún. Él me puso al tanto del mal que me aquejaba. Tenía nombre y se llamaba moscas volantes o miodesopsias. Mi ánimo se vino abajo cuando no me dió muchas esperanzas de solución, salvo que me decidiera por una intervención quirúrgica, bastante riesgosa y con resultados inciertos.
A partir de ese momento comenzó mi desalentador deambular por distintos consultorios. Exámenes y más exámenes para dar siempre (en el mejor de los casos) con el recetado de algún colirio, totalmente ineficiente, con la recomendación de la ya nombrada cirugía (a la que me negaba sistemáticamente), o en muchas oportunidades, con un consejo como este: “lo mejor que puede hacer es tranquilizarse y no prestarles atención”.
Durante 2 largos años lo intenté todo, pero ante la falta de resultados, una gran frustración y una creciente depresión se apoderaron de mí, este problema afectaba en mucho mi vida. Como último recurso, comencé a hacer averiguaciones para realizar una visita a un cirujano ocular…
Concurrí a una cita con el doctor y realmente no me daba la seguridad de poder eliminar definitivamente mis cuerpos flotantes. La falta de garantía y la cantidad increíble de dinero que pretendía cobrarme me hizo tomar unos minutos, pensar en frío y darme cuenta que era una locura. Pagar más de $6000 dólares por cada ojo intervenido, sin saber siquiera si funcionaría!
Adiós Moscas Volantes™ - Elimine Las Miodesopsias Para Siempre
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